Soy una socióloga especializándome en la mujer, que poco a poco ha ido y sigue abriendo sus dedos al dibujo improvisado. Un dibujo a mi entender lleno de caos, al menos el que intenta salir de mi, pero plasmado en una lámina en una metódica perfección geométrica, y cuando hablo de perfección de refiero a medidas, a líneas, reglas, compás, y mucho negro y mucho blanco.
No considero mi obra perfecta, sino todo lo contrario, llena de imperfecciones, tanto por el origen de la idea como la necesidad de transmitirla, y por eso la necesito. Dibujar con mi café las mañanas se ha convertido en una necesidad y forma de vida de la cual no quiero desprenderme, sino sumergirme cada día más. |